Tus ojos son mi conjuro
contra la mala jornada;
te quiero por tu mirada
que mira y siembra futuro.
-Mario Benedetti-
Enmedio del vértigo de las traiciones, las amenazas y las descalificaciones ante los seres amados, rindo desde aquí un homenaje a tu mirada honesta y tu palabra dulce y te agradezco la sonrisa que me regalas y que ha devuelto la mía.